La piscina de San Antón y otros dislates arquitectónicos y municipales

Patio central de la nueva sede del Colegio de Arquitectos de Madrid. Foto de voces. Licencia CC

Bien conocido es el hecho de la escasez de espacios verdes en el distrito de Chamberí. Y dentro de los espacios verdes clama al cielo la ausencia de instalaciones deportivas. Sobre todo después del cierre del estadio Vallehermoso. Tenemos las instalaciones del Canal de Isabel II casi como única referencia que cuenta con una piscina abierta con escasas zonas de estancia, una sala de gimnasia y algunas pistas de baloncesto, amén de un nuevo pabellón multideportivo a disposición del Real Madrid casi en exclusiva. Por cierto que sobre las instalaciones del Canal pende la incógnita de quien gobernará el centro, pues está en litigio la dependencia funcional de la Comunidad, actual propietaria y gestora o el Ayuntamiento de Madrid

Sumemos el famoso campo de golf justo enfrente dentro del parque Santander, los dos o tres campitos de futbol del mismo recinto y poco mas como por ejemplo la vetusta piscina del Parque Móvil.

Ante tal indigencia es motivo de alegría la apertura al público de la piscina cubierta de las Escuelas Pías, en la calle de Hortaleza. Aunque pertenece al distrito de Centro, la cercanía a Chamberí va a permitir que tengamos acceso a una instalación de primer nivel.

Curiosa historia esta del complejo de las Escuelas Pías o de San Antón. Edificio abandonado por la desidia eclesiástica fue objeto de una operación de trueque con el Colegio de Arquitectos de Madrid para ser convertido en sede de la entidad colegial así como espacio de carácter social que contaría con un polideportivo, un centro de mayores, una escuela infantil y otra de música y una zona ajardinada pública. De todo ese plan solo se ha puesto en marcha la sede oficial de los arquitectos en un edificio despampanante y grandilocuente que causa cierto asombro en los tiempos de penuria que padecemos. Y ahora la piscina sobre la que comentamos. Lo demás queda pendiente para mejores tiempos que vaya usted a saber cuando tocan.

Incluso la cosa tiene cierta guasa cuando sabemos que el centro de mayores y las dos escuelas están construidos pero ahora no hay dinero para su apertura y gestión. Y ya la guasa llega a la categoría de broma pesada y sarcasmo cruel cuando sabemos que el famoso polideportivo o sala deportiva multiusos no se puede abrir pues la configuración del edificio solo permite el acceso a tal espacio a través de la piscina. Quiere esto decir que salvo que los usuarios de la futura sala multideportiva, pongamos por ejemplo los esgrimistas, los gimnastas o los luchadores se pongan el bañador y las sandalias de plástico para atravesar la piscina tendrán imposible acceder. Que este dislate se haya cometido por los arquitectos elegidos por los propios arquitectos es de traca valenciana. Debe ser que nosotros los madrileños también queremos figurar en el libro guiness de los desaguisados urbanísticos de España compitiendo con los aeropuertos sin aviones, las salas de concierto sin música o las bibliotecas sin libros.

Pero bueno. Nos vale con la piscina. Será de propiedad municipal pero gestionada por un operador privado, como no. La entrada de adulto costará 4,45 euros pero existen abonos más asequibles. La piscina abrirá todos los días con diferentes horarios y ofrecerá actividades y cursos variados. Otra cosa, la entrada es por la calle Farmacia 13.